Protocolo de entrada en una boda religiosa

Muchas parejas se preguntan cómo y cuál es el protocolo en una boda. Si tienen que seguir unas pautas a la hora de entrar en el recinto en el que se celebra la ceremonia o si necesitan planificar todos y cada uno de los detalles con antelaciónLa entrada como novios es uno de los momentos más especiales de vuestra boda y con este post os vamos a ayudar a que así sea.

En el caso de que vuestra ceremonia sea civil podréis organizarla a vuestro gusto con más o menos toques personales o incluso dejar este tipo de detalles como la entrada a la finca a la improvisación del momento. En cambio si os casáis por la iglesia, tendréis que tener en cuenta un protocolo más estricto.

Por tanto si vuestra boda es religiosa os recomendamos que toméis nota ya que debéis conocer el protocolo, si bien no tenéis porqué respetarlo al pie de la letra y se permiten ciertas excepciones.

Normalmente los primeros en llegar a la iglesia son el novio, la madrina y su familia más cercana. Además de comprobar que todo está en orden y saludar al sacerdote, el novio y la madrina deben esperar en la puerta a los invitados a los que irán saludando e invitando a entrar en la iglesia.

La madre de la novia y la familia más cercana deben ser los siguientes en llegar para recibir también a los invitados en la puerta.

Este momento es la recepción de invitados y la música acompañará a los mismos en su entrada al templo. Además, gracias a los acordes que se escuchan en estos instantes el murmullo de los presentes no se elevará demasiado perturbando la espiritualidad del lugar.

Debéis elegir música instrumental que amenice el momento y que sea relajada y armoniosa como el Aria en Re de J. S. Bach o el Intermezzo de Cavalleria Rusticana de Mascagni.

Si queréis que la entrada de vuestra boda esté acompañada por la música más adecuada, contacta con nosotros o llámanos al  639 270 663

Tras los saludos pertinentes los invitados se irán sentando, siguiendo este patrón: invitados de la novia a la izquierda e invitados del novio a la derecha. No podemos olvidar que en los primeros bancos se situarán los familiares con un lazo de consanguinidad más fuerte con los novios, es decir, la familia más cercana. Y seguidamente, los amigos. Familiares y amigos disfrutarán de la música hasta que el novio haga su entrada.

Una vez que todos los invitados están dentro, sentados en los bancos y expectantes, es el momento del paseíllo del novio del brazo de la madrina. La madrina que suele ser la madre del novio (también le acompañan hermanas o tías en algunos casos) irá a su izquierda.

Cuando el novio ve aparecer el coche de la novia, debe tomar del brazo a la madrina y comenzar su paseíllo al compás de la música: Hornpipe de G. F. Haendel

Ambos esperarán pacientemente en el altar a que novia y padrino hagan su entrada, pero antes, el padre novio y la madre de la novia se dirigirán hacia el altar para saludarles y acompañarles en la espera.

Si hay damas de honor y/o testigos, tras la entrada del novio ellos caminarán hasta sus asientos (bancos de la izquierda novia y bancos de la derecha novio), sentándose en los bancos más cercanos al altar, normalmente dispuestos en los laterales de la nave. Suele acompañarles el Canon en re mayor de Pachelbel.

Y por fin, tras una espera aproximada de 10 minutos como manda la tradición (el retraso no debe ser mayor), llega el momento más esperado en toda boda (con permiso de los novios): la entrada de la novia del brazo del padrino. En el caso de llevar pajes o niños de arras, éstos andarán unos pasos por delante.

La novia debe de coger el brazo izquierdo del padrino, que irá a su derecha y caminar lentamente hacia el altar acompañada de su música favorita. Recomendamos una pieza romántica, emotiva, que haga a la novia protagonista del momento y preferiblemente vocal: Over the rainbow de la banda sonora de la película El mago de Oz.

Según el protocolo tradicional, en el altar la colocación, de izquierda a derecha, es la siguiente: madrina, novia, novio, padrino. Sin embargo hoy es más habitual la siguiente disposición: padrino, novia, novio, madrina. De forma que los novios estén entre su pareja y su familiar más cercano. Todos sentados de frente al altar.

Con respecto a la salida de la Iglesia, el cortejo saldrá en el siguiente orden (siempre mujeres colocadas a la izquierda de los hombres): pareja de recién casados seguidos de niños de arras o pajes, padrinos, madre de la novia y padre del novio y testigos.

La música que les acompañe debe ser alegre y festiva: Canticorum Jubilo de G. F. Haendel