En ocasiones las parejas que se van a casar y que están organizando la música para la boda, acuden a nosotros con alguna petición musical, quieren que en su ceremonia suene una canción que es especial para ellos o para algún familiar, alguna pieza musical de su país o región, en definitiva una música que es emocionante para ellos y que tiene un significado especial.

Ya que esa canción -o canciones si es que son varias- son singulares, merece la pena que se escuchen enteras y no todos los momentos de la ceremonia de una boda son adecuados para insertar temas completos; por ejemplo el momento de darse la paz si es que os casáis por la iglesia, o el tiempo que sube algún familiar o amigo a decir unas palabras si es que os casáis por lo civil, son espacios muy breves en los que sí conviene introducir alguna música que acompañe ese instante, pero no que lo alargue. Imaginad a todos los asistentes a una boda tras darse la paz o ver cómo sube un amigo a leer esperando tres o cuatro minutos en pié a que el grupo para la boda acabe una pieza entera.

Una boda no debe ser un concierto, es una ceremonia en la que lo más importante es el acto que celebráis ese día, los novios, sus familiares e invitados; la música acompaña ese día lo hace más bonito y especial pero no debe marcar el ritmo de la ceremonia.

A continuación os indicamos los momentos en los que recomendamos introducir esas canciones especiales y que no se pierdan porque haya que cortarlas. En estos instantes las podréis escuchar enteras, disfrutarlas y así quedarán siempre en el recuerdo de ese día.

Boda Religiosa:

• Entrada de invitados: Mientras los familiares e invitados llegan a la iglesia se pueden poner una o dos piezas enteras ya que hay tiempo para escucharlas, pero hay que tener en cuenta que los novios no han entrado aún en la iglesia y no podrán disfrutarlas, mejor reservar vuestra música preferida para más adelante.

• Entradas del novio y de la novia: Son el momento ideal para introducir la canción preferida de cada uno.

• Ofertorio: Mientras el oficiante presenta el pan y el vino hay tiempo suficiente para introducir un tema entero, suele ser el momento de un Ave Maria pero se puede sustituir.

• Comunión: Mientras comulgan los novios e invitados hay tiempo para introducir dos piezas enteras, aconsejamos siempre una vocal y otra instrumental para que haya más variedad.

• Firmas y fotos: Ya ha terminado la ceremonia y es un momento muy distendido y familiar, aquí igualmente hay tiempo para uno o dos temas enteros.

• Salida nupcial: Salida como marido y mujer. Es el momento clave. Es cierto que el «paseillo» de salida suele ser más corto de lo que los novios se imaginan y cuando salen de la iglesia la música queda atrás, pero qué duda cabe que es un momento muy especial para introducir algo que realmente os guste.

Boda Civil: